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Neurogénesis, motivación y creatividad.



Hasta hace relativamente poco tiempo, la ciencia arrojaba una perspectiva muy poco halagüeña; «el ser humano nace con un número determinado de neuronas, y por el mero transcurso de la vida, éstas van perdiéndose irrevocablemente». Hoy, afortunadamente, nuevas investigaciones han desmentido esta premisa completamente, introduciendo el concepto de neurogénesis.

La neurogénesis, como su propio nombre indica, no es otra cosa que la generación, o creación de nuevas neuronas, a lo largo de la vida. ¡Por fin sabemos que podemos reemplazar las neuronas perdidas por neuronas nuevas, si actuamos adecuadamente!

Además, tan importante como la neurogénesis es la creación de nuevas redes o conexiones sinápticas o neuronales. La forma en la que interactúan nuestras neuronas entre ellas, y en comunión con el resto de nuestro cuerpo, determinará nuestra capacidad mental y cognitiva.

Todos entendemos la importancia de poseer una mente despierta, activa y capaz, y esta materia cobra mayor importancia cuanto más avanzamos en el transcurso de nuestra vida.

¿Podemos influir en nuestra neurogénesis, en el fortalecimiento de las redes sinápticas y en general, en potenciar y mejorar nuestra mente? ¡Por supuesto!

Aunque hay múltiples maneras de hacerlo, este artículo va a citar algunas muy importantes, y fáciles de utilizar.


1- Sé creativo.

Potenciar la propia creatividad, aunque cueste un poquito en nuestros tiempos, es imprescindible. Al poner a trabajar el hemisferio derecho de nuestro cerebro, la imaginación se pone a trabajar para nosotros. Las capacidades creativas e imaginativas son tan relevantes en nuestra vida como las analíticas que tanto veneramos. ¿Cómo puedes hacerlo? De múltiples maneras, y seguro que muchas de ellas te encantan; pinta un cuadro, escribe una historia, una novela, o incluso una trilogía, fabrica algo con tus propias manos, juega con tus amigos, hijos, padres, hermanos, y sobre todo, déjate llevar.


2- Potencia tu lado optimista.

Parece una tontería, pero tratar de ver el lado positivo de la vida ofrece una visión panorámica, rica y abundante de la propia realidad de la vida. Lo positivo enriquece la experiencia, y con ella, el cerebro, el entendimiento y la mente. Por contra, una visión pesimista, oscura y deprimente de la propia experiencia, nos hará caer en conductas perniciosas y autodestructivas. Estudios recientes han asociado la enfermedad de Alzheimer y otros tipos de demencias a una visión tremendamente negativa de la experiencia vital de la persona que la padece, y a estados perniciosos de la mente (miedo, ira, etc). Así que ya sabes, ponte las gafas de color de rosa al menos una vez al día y ¡comienza a relativizar tus problemas!


3- Motívate.

La motivación es un revulsivo espectacular para nuestra vida. Sin motivación todo decae y se marchita, todo parece complicado e inalcanzable. Conseguir un estado de motivación mantenida en nuestra vida, nos ayudará a lidiar con los problemas de manera exitosa, a conseguir nuestras metas sin tanto esfuerzo, y a mantener unos hábitos mentales saludables. Un cerebro motivado se pone a trabajar. Una mente motivada genera una red neuronal activa y trabajadora. No te dejes caer en el hastío o el hartazgo. ¡Dale un empujoncito a tu mente y a tu vida!


4- Realiza ejercicio físico.

Todos sabemos lo importante que es el ejercicio físico, pero pocos son los que lo implementan diariamente en sus vidas. Mente y cuerpo están estrechamente relacionadas, y la una no puede enriquecerse sin la otra. Realizar ejercicio físico (el que sea y guste) a diario, favorecerá una buena oxigenación de la sangre y el cerebro, liberará las hormonas de la felicidad y potenciará la neurogénesis. ¿Puedes hacerte más listo entrenando? ¡Sí!


5- Melena de León.

Este tipo de hongo, poco conocido, posee unas características muy especiales. Por su composición se trata de un nootrópico, es decir, un generador de neurogénesis. Una cucharadita al día de polvo de melena de león, fortalecerá tus neuronas y las protegerá del daño oxidativo.


6- Centella asiática o Gotu-Kola.

¡Me encanta! Esta planta, que crece en el sur de la india forma parte de mi ingesta diaria. La centella asiática es capaz de mejorar la circulación sanguínea y de potenciar la capacidad cerebral. Una, o varias infusiones de centella asiática, harán una diferencia para ti si le das la oportunidad. También puede consumirse en ensaladas.


7- Ayuno intermitente.

El ayuno intermitente está de moda. Todos hemos oído hablar de él, en mayor o menor medida. Una de las cosas que más favorece la neurogénesis, además de ofrecer toda una serie maravillosa de virtudes (larga vida, menor índice de enfermedad), es permitir al cuerpo regenerarse por medio de la reparación celular, evitando la apoptosis de las células por daños irreparables. El ayuno puede lograr fortalecer tu mente y tu cuerpo. ¿Por qué no probarlo?


8- Lee, lee y lee.

La lectura es importante, no me cansaré de decirlo. El sano ejercicio de leer mantiene nuestra mente despierta y activa. Mientras que las pantallas y audiovisuales aletargan y ofrecen comodidad pasiva, un buen libro potencia la imaginación, la visualización y la inteligencia. Es hora de regresar a los orígenes y retomar el sano ejercicio de leer, ese que ha amenizado sin parangón a las generaciones que nos precedieron.


9- Medita.

La meditación, la gran desconocida de occidente, relegada a las terapias alternativas de mindfulness y yoga, conocida por muchos pero practicada por muy pocos. La meditación es un ejercicio de atención y concentración que favorece, estimula y promueve los atributos mentales de manera increíble. Meditar cada día durante media hora durante dos semanas es capaz de modificar la morfología cerebral...¡imagina lo que puede hacer por ti, practicada la vida entera! Si deseas potenciar tu mente, implementa la meditación en tu vida diaria. No tardarás en ver resultados impresionantes.


Como puedes ver, estimular la mente, potenciar la neurogénesis, y mantenernos alejados de enfermedades cerebrovasculares puede hacerse por medio de sencillos gestos diarios. Un estilo de vida saludable puede cambiarnos completamente.


Alma Carmen Mínguez Herrera







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